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ABRIL 2017
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ACTUALIDAD GLP
Se tentó por el cargo a varias personas ligadas al sector, pero dijeron que no.
E
n dieciséis meses de gestión, la polí-
tica de la administración macrista
fue, como mínimo, errática. Desde
diciembre de 2015 en adelante, el minis-
tro de Energía Juan José Aranguren, no
tuvo interés o no quiso darle volumen de
gestión a la Dirección de GLP, un área
que regula y administra un negocio que
incumbe al 40% de los argentinos.
Al cierre de esta edición, la Dirección
Nacional de GLP hace ya más de 90
días que no tiene un titular al frente. La
incertidumbre es la realidad, y todavía el
sector espera que se ponga en marcha
una política, buena o mala, pero una
política al fin.
En estos tres primeros meses del año, la
Dirección de GLP no tiene director luego
de la renuncia de Luis Barile un hombre
muy bien intencionado y con alguna
fuerza e idea para poner en marcha.
Pero la interna palaciega, que cobró la
renuncia de José Luis Sureda reciente-
mente, y la denuncia penal en su contra
por parte de la singular diputada oficia-
lista Lilita Carrió, Barile prefirió la renun-
cia ante el espanto.
De esta forma, la Dirección de GLP
sigue acéfala. Incluso cuando renunció
Barile el hombre de la cólera, Muzzicato,
que respondía a Sureda y sin nombra-
miento alguno desde el momento de su
difuso cargo de Director de GLP, ejercía
un poco el mando en la dependencia.
Ahora parece que ya no hay mando
alguno, sino que opera por la fuerza de
La Dirección del GLP a l
la realidad y el vacío un cuarteto integra-
do por abogados e ingenieros; la mayo-
ría nuevos y sin mucha experiencia.
Así como están las
cosas, la Dirección
navega.
Cuando
alguna empresa de
los
diferentes
rubros
presenta
algo, siempre es
mirada con cara de
recelo. Los expe-
dientes no se mue-
ven y nadie toma
decisiones porque
se instaló un aire de
preconcepto: si se
aprueba un expe-
diente todos pien-
san a quién benefi-
cia y por tanto se
sospecha.
Sin reemplazante
Luego de la salida de Barile, desde el
ministerio de Energía salieron a buscar
Sin el nombramiento
de un director, la
Dirección sigue
acéfala y los
expedientes no
tienen resolución.
Sin una cabeza estable al frente, la Dirección del GLP no tiene gestión de trabajo. Los expedientes quietos y sin
resoluciones a los distintos hechos que necesitan respuestas.
un candidato para su reemplazo. Esta
revista pudo constatar que se le ofreció
el cargo a: Gustavo Ramos, de YPF,
Daniel Quarleri, de
Medanito,
Oscar
Gambetta, de TIXO
y a un funcionario en
ejercicio en el Enar-
gas, próximo a jubi-
larse. Todos los
nombrados coinci-
dieron en algo: res-
pondieron que no.
¿Por qué nadie
acepta? Se podría
convenir en que
nadie tiene ganas de
asumir un cargo
donde no se lo apo-
ya un ciento por
ciento en las deci-
siones por tomar. La
idea del preconcepto sobrevuela: si se
beneficia a alguien es porque hay un
interés oscuro que alimenta esa deci-
sión. Y no sólo eso, sino que hasta se
El ministro de Energía
Juan José Aranguren no
tuvo interés o no quiso
darle volumen de gestión
a la Dirección de GLP,
un área que regula y
administra un negocio
que incumbe al 40% de
los argentinos.